El Adviento es el período de preparación para el nacimiento de Jesús. Si acudes a Misa en estos cuatro domingos de Adviento verás que los sacerdotes llevan detalles de color morado. Hay allí una corona de olivo o pino donde están las cuatro velas y se encienden una cada domingo. La corona es un símbolo. Es un período espiritual, de vivir en familia la llegada de un nuevo miembro.
Son cuatro los temas que se presentan durante los cuatro Domingos de Adviento:
Primer Domingo de Adviento:
La vigilancia, en espera de la venida del señor. La vela es morada.
Segundo Domingo de Adviento:
La conversión, la liturgia nos invita a reflexionar con las palabras del profeta Juan Bautista. La vela es morada
Tercer Domingo de Adviento:
El testimonio, que María, la Madre del Señor, vive sirviendo y ayudando al prójimo. Se le llama también Domingo de Gaudetes, por la alegría que produce en nosotros. La vela es de color rosado. Es una Misa especial para las mujeres: el sacerdote invita a acercarse al Altar a las damas embarazadas para recibir una bendición especial el fruto de su vientre. Es más bonito cuando el esposo la acompaña en este momento maravilloso.
Cuarto Domingo de Adviento:
La anunciación del nacimiento de Jesús. Las lecturas bíblicas dirigen su atención a la disposición de la Virgen María, ante el anuncio del nacimiento de su hijo. La vela es morada.
No hay cosa más hermosa que celebrar el adviento en familia, en un clima de recogimiento y alegría llena de emoción por el nacimiento de Jesús.
Si bien es cierto que su origen es pagano, los primeros misioneros aprovecharon esta tradición para evangelizar a las personas.
Partían de sus costumbres para enseñarles la fe católica para transformar sus vidas y prepararlos para la salvación del mundo
La Corona de Adviento constituye una gran variedad de símbolos:
La forma circular de la corona
El círculo no tiene principio ni fin. Nos dice que el amor de Dios es eterno, sin principio y sin fin, así como también es nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe terminar.
Las ramas verdes
El verde es el color de la esperanza y la vida, y Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas. Nuestro anhelo más importante debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.
Las cuatro velas
Nos hace pensar en la oscuridad provocada por el pecado que ciega al hombre. Así como las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, el mundo se fue iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo.
Son cuatro velas que ponemos en la corona, tres moradas y una rosada, que encendemos de una en una en cada Domingo de Adviento al compás de nuestra oración en familia.
Las manzanas rojas
Las manzanas rojas que adornan la corona representan los frutos del Jardín del Edén en espera de la promesa del Salvador Universal.
El listón rojo
Representa nuestro amor a Dios y el amor de Dios que nos envuelve.
La corona se puede llevar al templo para ser bendecida por el sacerdote. Pero también se puede bendecir en la familia con las palabras rituales en el Primer Domingo de Adviento.
No hay nada más hermoso que encender las velas orando en familia y así nuestra familia será más fuerte y amorosa.
El Adviento es el tiempo de preparación para celebrar la Navidad y comienza cuatro domingos de esta fiesta. También señala el inicio del Nuevo año litúrgico, el cual en este año de 2022 empezará el 27 de noviembre.
Se dice que empieza el domingo más próximo a la Fiesta de San Andrés Apóstol que es el 30 de noviembre. El Adviento comienza, entonces, el 27 de noviembre y termina el 24 de diciembre.