Se podría pensar que son producto de la avanzada tecnología que permite su difusión masiva e instantánea, es decir, que es algo novísimo, tanto que hasta tiene un nombre: Fakenews.

            Pero las noticias falsas son tan antiguas como la humanidad, inclusive, el chisme ha sido considerado como un arma de guerra muy efectiva para desmoralizar a las tropas enemigas.

            El despliegue que hacen las potencias de su poderío militar tiene, igualmente, la intención de desanimar a cualquier otra potencia de iniciar una confrontación. Ahora lo vemos más seguido en Corea del Norte y, sí, tenemos miedo porque su líder no actúa con coherencia ni bondad.

            Se las puede ver en todos los campos. Cierto médico en Iquitos dijo que los tamancos al caminar golpean el talón y con ello ocasionan daños a los riñones.

            El tamanco es una sandalia de madera muy práctica y barata y verdaderamente de uso general, lo usábamos todos, chicos y grandes, hombres y mujeres. Los fabricaban en la cárcel.

            Al escuchar la falsa noticia en la radio dejamos de usarlo para evitarnos daños en los riñones. Pero no era cierto, la mayoría de países en el mundo lo usan sin ningún temor. Años después el señor Córdova creó unos tamancos de madera estilizada, decorados con paisajes y figuras amazónicas en colores, solo para damas porque tenían tacos muy altos y eran muy costosos. Volvió la moda y se olvidaron de la noticia que nos hizo desistir de usar una prenda muy práctica.

            Cierta vez mi sobrina Gaby vino a la casa y nos advirtió: “tío, no uses desodorante en spray”. Porque había leído en una revista que eso dijo un investigador.

            Cualquier sacha investigador, sin pruebas exhaustivas dice una burrada y los ingenuos le hacen caso y empiezan a difundirlo por los medios que tuvieran a su alcance.

            Así tenemos los antivacunas quienes inventan razones dizqué basadas en “informaciones científicas” porque pueden ocasionar autismo. Hay quienes se oponen a que instalen antenas en su zona porque “la radiación les va a afectar el cerebro”. Algunos salen a decir que ya les está doliendo la cabeza. Quieren celulares que cubran todo el espectro pero no quieren que les pongan una antena. Quizás quieren celulares de magia.

            En la actualidad salen muchísima información sobre la pandemia pero la mayoría es falsa, por eso la ONU recomienda escuchar a las autoridades del gobierno porque ellos son interlocutores válidos y tienen información certificada y aprobada.

            Es bueno aclarar que no hay vacuna peruana, todavía, pero está en marcha un proceso para su elaboración, con la cual nos vamos a beneficiar todos. Sería bueno, también, que las autoridades del gobierno apoyen a nuestros científicos, que para eso los hemos educado: a las autoridades y a los científicos.

            Debemos evitar el “deporte nacional” de andar recetando remedios caseros y tratamientos pseudocientíficos que podrían hacer que la gente se confíe y descuide el cumplimiento de las recomendaciones y prohibiciones. El daño sería muy grande e irreparable.

            Una forma muy difundida en las redes sociales es enviarte un aviso de un problema y te dicen que debes compartir con tus contactos para que no se vean afectados. La advertencia es falsa y solamente quieren robarte tu lista de contactos para enviarles mensajes en tu nombre. No compartas nunca mensajes así. Bórralos.

            Igualmente te envían oraciones o imágenes benditas y te dicen que los compartas con tus contactos porque en una hora recibirás un milagro. No lo hagas nunca. Ora solamente con tu grupo de oración porque es posible que la mayoría de tus contactos no tengan tu misma fe. La misma Iglesia Católica recomienda jamás difundir las llamadas “cadenas”. Son estafas.