La leche es el alimento más completo que existe, lo sabemos todos y estar repitiéndolo resulta una verdad de Perogrullo.
Que es la principal fuente de calcio, necesario para el desarrollo y crecimiento de los huesos es de conocimiento general y en ello todos estamos de acuerdo. Pero aun así lo siguen repitiendo los médicos, los nutricionistas, los cocineros y hasta los panaderos.
Pero lo que resulta intolerable es que lleves a la Ginecóloga a tu hija que recién ha dado a luz y en vez de dar alguna recomendación inteligente o útil le salga diciendo que lo mejor es la leche materna. Lo sabemos desde que tenemos uso de razón y no era necesario pagar a una profesional de la salud para que nos lo diga.
En la actualidad se menciona que hay leche de vaca, oveja, de cabra y hasta de búfala, pero en el Perú solamente encuentras la leche de vaca bajo diversas formas: fresca, evaporada, en polvo, condensada, crema de leche, etc.
Pero muchas personas están experimentando un rechazo a la leche entera por lo que recurren a la leche deslactosada. Si aún a esta leche no la pueden soportar entonces se recurre a las leches vegetales.
La menos recomendada es la leche de soya porque estriñe a los niños y personas mayores. Pero hay siempre una solución para todas las necesidades.
En Requena una vecina de la familia Alva Rivera decía oronda que su hijita de un año de edad no quiere tomar leche de vaca, que ella prefiere tomar masato en vez de leche.
Es sabido que la leche de pueblo es muy completa porque no está pasteurizada por lo cual produce una nata muy espesa con sabor a mantequilla en la superficie de la taza.
La vecina lo decía muy orgullosa que su hijita no necesita de ninguna leche de vaca puesto que con el masato tiene “suficiente” alimento.
El masato es una bebida hecha con yuca cocida, machacada y ligeramente fermentada que al desleír en agua toma una apariencia blanca lechosa que parece leche. Es natural que la bebita haya preferido tomar masato en vez de su leche, pero es la mamá quien debió pensar por ella. El masato parece leche pero no es leche ni tiene las sustancias nutritivas que tiene la leche de vaca, fuera de carbohidratos. A la pequeña le dio pelagra.
La pelagra es una enfermedad producida por una avitaminosis por deficiencia de la vitamina B3 y se presenta con diarreas y dermatitis.
La vecina aprendió amargamente que con la salud y el bienestar de nuestros hijos no se juega y deben siempre consumir leche, verdadera leche, para desarrollar su crecimiento físico e intelectual.