Escribí antes un post en mi blog recordando una Tradición de don Ricardo Palma que hacía referencia a una acción no cabal, y peor aun cuando se hace referencia a actos inadecuados de gente de la Iglesia:
«Cosas tiene el rey cristiano
que parecen de pagano»
Cada cierto tiempo, desde el concilio Vaticano II, se producen cambios en las formas de los rituales de la Misa.
En tiempos en que recién se estaba comenzando a usar las respuestas a las Lecturas de la Misa y la gente aún no había interiorizado este procedimiento, se produjo este hecho:
En Ventanilla, Parroquia San Pedro Nolasco, se estaba celebrando la Misa de la Primera semana del fallecimiento en acción del valeroso miembro de la Guardia Republicana del Perú (GRP), Oscar Monasterio Urbina, hermano de nuestra comadre Juana Monasterio Urbina.
Ahora todo el mundo sabe que tanto la Primera Lectura como la Segunda Lectura terminan con la simbólica frase “Palabra de Dios”. El pueblo responde “Te alabamos Señor”. Cuando el sacerdote anuncia “Proclamación del Santo Evangelio” nos persignamos y decimos “Gloria a Ti Señor” y cuando termina la proclamación del Evangelio lo hace con la frase “Palabra del Señor”. Todos respondemos “Gloria a Ti Señor Jesús”.
Cuando hablé con mi hermano Mayor, Raúl, quien sabe mucho de los temas de la Iglesia, él es Catequista, Ministro Extraordinario de la Eucaristía y estaba estudiando para Diácono, me dijo que en ese entonces recién se estaba estableciendo este nuevo ritual, pero que aún no estaba generalizado. Esto se logra poco a poco hasta que la gente lo haga suyo.
Pero en aquel entonces pocos sabían de este cambio y en Ventanilla nadie lo había aprendido aún. Por eso cuando el Párroco dijo “Palabra del Señor”, nadie respondió. El cura volvió a decir más fuerte y nadie entendía qué es lo que quería. Visiblemente malhumorado gritó otra vez “Palabra del Señor”. La Misa se había interrumpido porque el sacerdote quería que el pueblo responda de acuerdo a las nuevas normas que nadie sabía.
Me pareció horroroso este hecho, pero recordé algo de cuando acompañaba a mis hijas que eran Catequistas en nuestra Parroquia Santa María Magdalena en Pueblo libre, y tímidamente dije “Gloria a Ti Señor Jesús”. El cura pareció satisfecho pues dijo “Eso, así se responde, Gloria a Ti Señor Jesús”. “A ver ahora: Palabra del Señor”, todos respondimos “Gloria a Ti Señor Jesús”. Es decir:
“Cosas tiene el rey cristiano
que parecen de pagano”.